sábado, 24 de agosto de 2013

1966.- PENSAMIENTOS SOBRE GULMONT


Acceso al Boletín nº 6 completo:
Nº 6 del Boletin informativo de las actividades del Grupo Universitario Laboral de Montaña y Espeleologia.
Portada: Nevado Elola (I Expedición Española a los Andes)
Dibujos: Algunos inspirados en la revista "Montañeros de Aragón", nº 58, Realizados por Fr. Ezequiel Rayo.
Universidad Laboral de Córdoba, junio 1966

PENSAMIENTOS SOBRE GULMONT

Pasado y futuro de la Agrupación

Hace seis años que nacía Gúlmont para encauzar educativamente la afición montañera de un grupo de alumnos de esta Universidad. Aún recordamos aquellos primeros tiempos en que la ilusión de un puñado de jóvenes superó la carencia da medios y material. Exigencia, entusiasmo, selección y preparación adecuada, sobre todo en un plano religioso y humano. Sus nombres tras años de separación, siguen sonando entra nosotros como signo de eficiencia y permanencia de una sana afición: Pedro Plana, Ricardo Veroz, Amalio García, José Ignacio Fernández, ...
La Universidad nos ha favorecido. El apoyo dado por el P. Rector a nuestra empresa la elevó a una categoría no soñada por nosotros. Nuevo material, una mayor amplitud de actuación, mayor número de miembros, etc.
Pero la falta de autocrítica puede ser nuestra perdición. La masificación de actividades minoritarias es un peligro. Por eso hemos pensado en la necesidad de crear grupos seleccionados y básicos, mejor atendidos en sus valores formativos. Y este curso dedicamos más atención a los grupos de espeleología y escalada, de donde deben salir los jóvenes clave de la Agrupación.
Necesitamos mantener esta línea de preparación y exigencia, a la vez que de selección, para cursos posteriores, en un programa a cumplir por quien quiera sacrificarse en una labor formativa de suma importancia. No desechamos el otro aspecto masivo de la Agrupación que junto a una exigencia mínima, alcanza un conjunto de valores para un mayor número.
Ahora que Gúlmont adquiere personalidad, resonancia y extensión sería grave error creer que todo entá conseguido. Poco ha, recibía una carta de un viejo: amigo: "Acabo de leer el nº 5 de 'Gúlmont' y me estaba dando pena que se terminasen tan pronto estas páginas, donde alienta tanta ilusión, hombría y sanidad. Cuide de que, al crecer, el Gúlmont no pierda su pureza" (Rvdo. P. Prior de Caleruega).
Esta es nuestra preocupación. Pero esperamos que Gúlmont no pierda de vista las metas que justifican su existencia. Así, el esfuerzo de 6 años no habrá sido inútil. Atrás queda una experiencia y un imborrable recuerdo quo nos acompañará siempre.
Fr. Jesús García

No hay comentarios:

Publicar un comentario